Las redes sociales se han llenado de posts recordando a uno de los músicos más influyentes en la comunidad rockero. No creo que ningún guitarrista con ya una edad (por encima de los 50 años) no haya sentido la muerte de Jeff Beck a los 78 años de edad.
Jeff era un guitarrista mágico, que, increíblemente, no llegó a ser una super estrella aunque siempre brilló entre sus compañeros como si lo fuera. No hay hacha de la guitarra que no le cite entre sus influencias.
Formó parte de una de las mejores bandas de los 60 y 70, The Yardbirds, a la que llegó recomendado por Jimmy Page, con los que escribió una página de oro. Y no lo tuvo fácil al principio, ya que tuvo que sustituir al, por aquel entonces insustituible Eric Clapton.
Posteriormente formó el Jeff Beck Group que en sus principios formó con Jeff y al lado tenía, nada más y nada menos que a Ron Wood (The Rolling Stones) al bajo y Rod Stewart a la batería.
La fama de Beck era tal, que bandas tan grandes como Pink Floyd o The Rolling Stones intentaron hacerse con sus servicios.
La lista de colaboraciones de Jeff era impresionante. Desde Stevie Wonder a Jon Bon Jovi, pasando por ZZ Top, Duff McKagan, Mick Jagger, Roger Waters, Brian May, Muddy Waters o Joe Cocker entre otros muchos.
Descanse en paz. Seguro que estará haciendo ya algunas jams con Jimi Hendrix y Eddie Van Halen.
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